Comisión aprueba dictamen que reconoce a los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas como sujetos de derecho público.

La Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó un dictamen que reforma el artículo 2º de la Constitución Política, con el objetivo de reconocer a los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas como sujetos de derecho público, con personalidad jurídica, patrimonio propio y respeto irrestricto a sus derechos humanos. Este dictamen, que deriva de una iniciativa presentada por el Ejecutivo Federal el 5 de febrero de 2024, fue aprobado en lo general por unanimidad con 37 votos y en lo particular con 36 votos.

El presidente de la Comisión, el diputado Juan Ramiro Robledo Ruiz (Morena), explicó que el artículo 2º de la Constitución ha evolucionado para incluir un estatuto que regula a los pueblos y comunidades indígenas, proponiendo una constitución para ellos dentro de la Carta Magna. Este nuevo artículo 2º enuncia los derechos de estos pueblos y comunidades para establecer sus normas y reglas de organización en distintos ámbitos de su vida comunitaria. Además, se establece que el Estado mexicano reconoce estos derechos y asume la responsabilidad de promover y gestionar políticas públicas que mejoren la vida de estas comunidades.

El dictamen también incluye un apartado dedicado a las comunidades afromexicanas, resumiendo sus derechos, así como los de las mujeres y los niños de estas comunidades. Durante la discusión, varios diputados resaltaron la importancia histórica de esta reforma, que garantiza a estos pueblos y comunidades la capacidad de tomar decisiones colectivas y reconoce su estatus como sujetos de derecho público.

La reforma es vista como un avance significativo en la protección y reconocimiento de los derechos de las comunidades indígenas y afromexicanas, aunque algunos diputados señalaron que aún queda trabajo por hacer para cubrir todas sus necesidades. La aprobación de esta reforma coincide con el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, celebrado el 9 de agosto, y representa un paso importante hacia la reparación de injusticias históricas.