La producción de petróleo crudo ascendió a 1 millón 564 mil barriles diarios durante mayo, lo que representó su primer incremento en los últimos ocho meses, según datos de la Comisión Nacional Hidrocarburos (CNH).
Luego de tocar mínimos históricos, la producción de ‘oro negro’ logró registrar un ligero repunte de 0.3 por ciento respecto a abril, sin embargo, no es suficiente para ‘maquillar’ el declive de la producción.
A pesar de la recuperación, la producción petrolera todavía es 6.7 por ciento inferior a la observada durante el mismo mes del año anterior.
De manera desagregada, Pemex produjo 1 millón 479 mil barriles diarios, lo que significó un impulso de 0.36 por ciento a tasa mensual. Sin embargo, la producción de las petroleras privadas se ubicó en 84.5 mil barriles, lo que se tradujo en una disminución de 0.6 por ciento.
Al incluir 269 mil barriles de condensados, la producción de hidrocarburos líquidos fue de 1 millón 833 mil barriles diarios, cifra muy similar a la observada en abril.
La CNH detalló que actualmente se encuentran operando 6 mil 802 pozos productores de hidrocarburos líquidos, de los cuales el pozo más productivo es Maloob, con 322 mil barriles diarios, seguido de Quesqui (165 mil barriles diarios), Zaap (160), Tupilco Profundo (98), Ayatsil (90), Ixachi (62) y Balam (58).
Además, se tiene registro de 15 contratos de producción de hidrocarburos líquidos, lo que significó un retroceso de 25 por ciento respecto a los observados en mayo de 2023.
Necesario invertir para el futuro
Respecto al tema, Agustín Díaz Lastra, comisionado presidente de la CNH,resaltó la importancia de invertir en los recursos prospectivos de hidrocarburos.
“Desde hace ya algunas décadas, las políticas públicas sobre hidrocarburos se han orientado primordialmente a la extracción. Hasta hace apenas seis años, gracias a las atinadas decisiones del presidente Andrés Manuel López Obrador, de nuevo se estableció la política de reponer el cien por ciento de las reservas extraídas anualmente, lo que se ha podido lograr”, afirmó.
Agregó que la reposición de reservas proviene en su gran mayoría de los recursos prospectivos, los cuales, después de cuantiosos trabajos de alto perfil profesional y tecnológico, pueden ser contabilizadas con algún por ciento de probabilidad, lo que facilita, tanto sus restantes trabajos exploratorios y extractivos, como las asignaciones presupuestales y financieras para las correspondientes inversiones.
Sin embargo, Díaz Lastra puntualizó que los recursos potenciales aún no aparecen explícitamente en las políticas públicas ni los planes de negocio. “En todo caso, apenas se logra encontrarlas en los presupuestos anuales”, apuntó.
Puntualizó que México ya no se encuentra en una etapa de grandes descubrimientos de hidrocarburos.
“Después de más de un siglo de extracción, durante el cual se ha extraído alrededor de la mitad del volumen de recursos prospectivos totales estimados recientemente, nos encontramos en una tendencia contraria a la que prevalecía hasta los años setenta del siglo XX”, indicó.
La última estimación realizada por la CNH arroja un total de recursos prospectivos del orden de los 112 mil 900 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
De esa cantidad, se tiene previsto que unos 24 mil millones se encuentren en el subsuelo marino bajo tirantes de agua mayores a 500 metros, conocidos como aguas profundas, otros 15 mil bajo aguas someras y 74 mil en yacimientos terrestres.