La certeza legal es fundamental para estos proyectos de energía eólica a largo plazo. No son cosas que se puedan ajustar de un día para otro, advirtió Laura Sima, Agregada de Energía y Directora de Oficina, Embajada de los Estados Unidos en México.
Sima mencionó que varias empresas del sector energético han expresado preocupación por la incertidumbre que han generado las recientes reformas al Poder Judicial en México.
“La certeza legal es fundamental para proyectos de energía eólica marina que se están desarrollando en Estados Unidos. No son cosas que se puedan ajustar de un día para otro”, comentó.
Estos proyectos, que tienen el potencial de generar hasta 24 mil megavatios de electricidad para 100 mil hogares estadounidenses, están en una etapa clave de financiamiento. Sin embargo, Sima advirtió que las recientes reformas al Poder Judicial en México han sembrado dudas entre los inversionistas extranjeros, quienes buscan certezas para sus capitales a largo plazo.
Inversionistas evalúan si continúan en México por incertidumbre en reforma judicial
Laura Sima explicó que, mientras en Estados Unidos se está trabajando en acelerar el desarrollo de la energía eólica marina, muchos inversionistas están evaluando dónde encontrar mejores condiciones de estabilidad a largo plazo entre México y Estados Unidos.
“Las modificaciones legales en México han generado incertidumbre sobre la continuidad de los contratos y las garantías necesarias para que grandes proyectos energéticos puedan concretarse”, aseguró.
Este sentimiento también ha sido expresado por Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, quien ha mostrado preocupación por el impacto de las reformas en sectores clave como el energético.
Salazar afvirtió que los cambios en la legislación podrían afectar negativamente el ambiente de negocios y la confianza de los inversionistas internacionales que requieren seguridad jurídica para proyectos de infraestructura que suelen extenderse por décadas.
Ante esto, el presidente Andrés Manuel López Obrador pausó su relación con el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, y se negó a dialogar con el funcionario estadounidense para lograr un acuerdo sobre la reforma al Poder Judicial.
“No es posible que un embajador extranjero opine lo que está bien o mal en nuestro país. Esa no es su función”, añadió el presidente.
