Ante el aumento que enfrenta Coahuila en la tasa de defunciones, asociaciones civiles urgieron a que se modifique el modelo de atención a la enfermedad en el estado, pues aseguran que actualmente se dejan de lado acciones de tratamiento.
Coahuila se ubica como la tercera entidad con más muertes en el país según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), que señalan que la tasa alcanzó 24 muertes por cada 100 mil habitantes en 2023, un incremento significativo respecto al año anterior, cuando se ubicaba en el quinto lugar.
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Briseida Hernández, fundadora y directora de Casa Rosa A.C., una organización dedicada a apoyar a pacientes con cáncer, destacó que en el estado persisten retos significativos para la atención del cáncer, pues la mayoría de los recursos se destina a la prevención y detección, dejando de lado áreas cruciales del tratamiento.
Uno de los principales problemas radica en la falta de estudios diagnósticos necesarios para el seguimiento de las pacientes. Exámenes como el gammagrama y otros estudios cuyos costos pueden ser de hasta 60 mil pesos, no están al alcance de muchas mujeres, por lo que Hernández señaló que estos estudios son vitales para detectar metástasis y asegurar que el cáncer no ha regresado, pero su costo impide que muchas pacientes puedan acceder a ellos y son dadas de alta sin dicha valoración.
Además, el sistema de salud enfrenta retos en la disponibilidad de tratamientos, pues aunque las quimioterapias están disponibles, hay meses en que no se proporcionan de manera constante. Esta situación, según explicó Hernández, se deriva de la falta de actualización en los convenios entre el sector salud y hospitales privados, además del mantenimiento de equipos.
La situación es aún más compleja para quienes deben desplazarse a la capital desde localidades como Piedras Negras, Torreón, Sabinas, Acuña y Allende debido a que quimioterapias especiales y radioterapias solo se ofrecen en Saltillo, dejando en evidencia la urgente necesidad de más hospitales en otros puntos del estado para la atención de pacientes oncológicos.
Esta situación, según Briseida, crea una carga adicional para pacientes que, además de enfrentar una enfermedad grave, deben lidiar con el estrés económico y emocional de viajar para recibir atención. Entre otras cuestiones se encuentran la falta de opciones en el sector público para mamoplastias reconstructivas y falta de prótesis para las pacientes.
Estas situaciones, señaló, son más frecuentes en pacientes que son atendidas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), 7 de cada 10 pacientes que son recibidas en Casa Rosa.
En el mes de la lucha contra el cáncer de mama, Briseida Hernández hace un llamado a las instituciones y al gobierno para que no solo se enfoquen en la detección, sino también en asegurar la continuidad de los tratamientos de las mujeres coahuilenses.
Finalmente, la directora de la asociación invitó a la población a unirse a las actividades de apoyo y recaudación de fondos que realiza Casa Rosa. “El cáncer avanza rápidamente, y necesitamos que más personas se involucren para ayudar a quienes están atravesando este proceso”, concluyó.