En su último informe sobre finanzas públicas, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reveló un panorama preocupante sobre la gestión fiscal en Coahuila. Mientras que los recursos destinados al pago de servidores públicos aumentaron considerablemente en 2023, la inversión en obra pública experimentó un ajuste negativo significativo.
De acuerdo con los datos proporcionados por el INEGI, Coahuila destinó en 2023 la cantidad de 20 mil 920 millones de pesos a los pagos de servicios personales, es decir, a los salarios de los servidores públicos. Este rubro incluye tanto las remuneraciones de los empleados del gobierno como sus bonos, estímulos y gastos relacionados con la seguridad social.
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En comparación con 2022, este gasto mostró un aumento del 10 por ciento, lo que representa un incremento cercano a los 2 mil millones de pesos, pues en 2022 la cifra había sido de 19 mil 039 millones.
Aunque los funcionarios del gobierno estatal han señalado que este aumento se debe a los ajustes necesarios para enfrentar la inflación, el informe del INEGI también señala que otros sectores, como la inversión pública, no recibieron los mismos ajustes.
En 2023, Coahuila destinó solo 2 mil 682 millones de pesos a obra pública, un 12 por ciento menos que en 2022, cuando se reportaron 3 mil 065 millones. Esta reducción de casi 500 millones de pesos se produce a pesar de que los costos de construcción aumentaron durante ese período.
Además, el informe del INEGI también reflejó un aumento en el gasto destinado al pago de la deuda pública, que pasó de 7 mil 322 millones de pesos en 2022 a 8 mil 532 millones en 2023, una cifra que sigue la misma tendencia inflacionaria.
