El escritor leridano Ferran Grau y el argentino César Aira han ganado este martes la quinta edición de los premios Finestres de narrativa en catalán y castellano, dotados cada uno con 25.000 euros, por sus obras Hiperràbia (Angle Editorial) y En el Pensamiento (Random House), respectivamente. En un acto que se ha celebrado en la Fundación Conservatorio Liceu, en el que ha actuado como maestra de ceremonias la comunicadora y cómica Ana Polo, también se ha concedido el cuarto premio Finestres de cómic en catalán, dotado con 25.000 euros, a la italiana Giulia Sagramola por Cap endavant. Ha habido, asimismo, una mención al talento joven, dotado con 15.000 euros, al proyecto de cómic de la gallega Uxía Larrosa, El despreniment, mientras que ha quedado desierta la segunda mención.

El jurado del premio en catalán, integrado por Marina Espasa, Anna Guitart, Mara Faye Lethem, Pere Antoni Pons y Gemma Medina, ha decidido proclamar ganadora del Finestres de Narrativa en catalán a la novela de Ferran Grau, Hiperràbia, por su “atrevimiento y el grado de elaboración y reescritura literaria” a partir del crimen real de una mujer en un cajero de Barcelona y de La naranja mecánica, de Anthony Burgess. Grau, que ha mostrado su alegría por el premio tras imponerse a Cavall, atleta, ocell, del valenciano Manuel Baixauli, y a Marxarons, de Cristina Masanés, distinguidos en otras convocatorias, ha destacado que en este título homenajea a La naranja mecánica, especialmente tras saber que los implicados en el crimen del cajero explicaban que buscaban actuar como los “chicos” de aquella obra. “Sin darme cuenta -ha indicado- pero en mis tres novelas escritas en solitario siempre estoy escribiendo sobre la violencia. En la primera me centraba en la violencia internacional, geopolítica, mientras que en la segunda era la psicopática y aquí abordo la gratuita, además del tema de la reinserción social”.

El jurado del premio de narrativa en castellano, formado por Jordi Costa, Mathias Enard, Camila Enrich, Mariana Enriquez y Carlos Zanón, ha reconocido En el pensamiento, de César Aira, por el “placer lúdico de fabular del autor, la profunda ligereza y la sencillez aparente de una prosa y una estructura de una novela que se suma a un proyecto literario monumental”. El autor, que no se ha podido desplazar a Barcelona, en esta obra, a través de una supuesta evocación autobiográfica, “juega con la inteligencia de los lectores”, en una novela que puede “entenderse como la declaración de una poética curiosa por el lenguaje en sí mismo antes de hacer un giro inesperado a la historia de la infancia”. Los finalistas del Premio en castellano han sido el peruano Gustavo Faverón con Minimosca y el guatemalteco Eduardo Halfon con Tarántula.

En un perfecto catalán, la italiana Giulia Sagramola, dibujante de cómics e ilustradora de la localidad de Fabriano (Italia) pero instalada en Barcelona, donde ha estudiado ilustración en la escuela Massana, ha agradecido el premio por Cap endavant, que un jurado formado por Jordi Pastor, Noelia Ibarra, Xavier Domènech, Roser Messa y Nadia Hafid ha premiado por unanimidad por “reflejar de manera brillante la presión social en relación a la maternidad”. El cómic está protagonizado por Elisa, quien lucha por cumplir su sueño de convertirse en diseñadora de tipografía, mientras siente la presión de su familia para que se case y tenga hijos. Con algún que otro toque autobiográfico, Sagramola ha señalado que en la obra habla de “la tensión y la ansiedad que crean las expectativas que tienes en la vida”.