Las autoridades mexicanas han entregado este martes a Estados Unidos a Román Alberto Muñoz Meza, acusado de haber vendido las armas que se utilizaron en el ataque a Omar García Harfuch, en 2020, cuando era secretario de Seguridad de Ciudad de México. Nacido en Dallas, Texas, “era buscado por autoridades de Estados Unidos, como objetivo prioritario por el tráfico y contrabando de armas de fuego”, ha apuntado la Fiscalía de Chihuahua en su comunicado.

Apenas pasaron seis horas desde Muñoz Reza fue detenido en México hasta que fue cruzado por el puente internacional Lerdo-Stanton que une Ciudad Juárez con El Paso, Texas. El arresto se llevó a cabo a las 11 de la mañana en la carretera, apenas a 20 kilómetros de la ciudad de Chihuahua, por elementos de la Guardia Nacional, de la Secretaría de Defensa y de la Fiscalía. A las 16.40 horas, el acusado ya estaba cruzando la frontera.

Muñoz Reza estaba requerido en Estados Unidos, pero también tiene cuentas pendientes en México, según ha compartido la Fiscalía de Chihuahua. “Ha sido relacionado con la venta de armas utilizadas en el homicidio de un agente de migración y dos agentes ministeriales en 2022, en el estado de Chihuahua”, apunta la dependencia.

Además el acusado fue presuntamente quien consiguió las armas para el ataque que perpetró el Cartel Jalisco Nueva Generación en junio de 2020 contra García Harfuch en Ciudad de México. En las siguientes horas a la agresión fueron detenidas 12 personas, pero se cree que en el comando tuvieron alguna participación más de 50. Esta docena de arrestados fueron condenados a 316 años de prisión cada uno, por el asesinato de tres personas (dos escoltas y una vendedora que estaba en el lugar) y por el intento de homicidio del secretario de Seguridad, que sobrevivió a más de 400 disparos.

Las labores de “inteligencia policial” sitúan al hoy entregado como “uno de los mayores proveedores de armas de fuego a los cárteles en esta entidad”, aclara la Fiscalía de Chihuahua, sobre el hombre de 41 años. “El resultado de esta operación forma parte del compromiso de atender la confianza brindada por las autoridades de Estados Unidos, lo que ha permitido la captura de objetivos prioritarios de interés para ambos países, para el combate a bandas del crimen organizado”, apuntaba la dependencia.

La deportación de Muñoz Reza tiene lugar una semana después de que México entregara a 29 capos del narcotráfico a Estados Unidos, en una operación sin precedentes que involucró a más de 3.500 agentes de seguridad. Entre los delincuentes entregados estaba Rafael Caro Quintero, buscado desde hacía 40 años por EE UU por el asesinato del agente de la DEA Kiki Camarena; los líderes de Los Zetas, Omar y Miguel Ángel Treviño Morales, conocidos como Z-40 y Z-42, o el fundador de la Familia Michoacana. Este operativo masivo tuvo lugar en medio de la negociación entre México y Estados Unidos por la intención del Gobierno de Donald Trump del norte de aplicar aranceles del 25% a las exportaciones mexicanas. La amenaza se hizo realidad esta misma semana, pero las entregas al otro lado de la frontera continúan.